Parte interior Hacienda Los Molinos cuya construcción data del año 1600 aproximadamente Foto: Amanecer Comunitario |
Miguel de Cervantes escribió alguna vez que "la historia es émula del tiempo, depósito de las acciones, testigo del pasado, ejemplo y aviso del presente y advertencia de lo porvenir".
Cuando uno recorre parte de lo que era La Hacienda Los Molinos, comprueba que ciertamente para entender el presente, es necesario darle una mirada al pasado, transportarse a aquella época en la que se construyó gran parte de la ciudad capital, mirar los vestigios de ese momento histórico plasmados en construcciones o simplemente en historias de los lugareños, es entender un poco mejor el contexto de aquellos años.
Por eso cuando la Alcaldía Local Rafael Uribe, invitó a los medios comunitarios y algunos líderes del sector a hacer un recorrido por esta zona histórica, no dudamos en acompañarlos, además por que vimos la oportunidad de documentar estos espacios históricos y que otros se sientan motivados a visitarlos, agradecimos a la Secretaria de Cultura, el Instituto Distrital de Recreación y Deporte y al acompañamiento de la Corporación Kontrabía, quienes coordinaron esta visita.
Por eso cuando la Alcaldía Local Rafael Uribe, invitó a los medios comunitarios y algunos líderes del sector a hacer un recorrido por esta zona histórica, no dudamos en acompañarlos, además por que vimos la oportunidad de documentar estos espacios históricos y que otros se sientan motivados a visitarlos, agradecimos a la Secretaria de Cultura, el Instituto Distrital de Recreación y Deporte y al acompañamiento de la Corporación Kontrabía, quienes coordinaron esta visita.
Molino de piedra, se movía con agua de la quebrada Chiguaza. |
En este recorrido patrimonial pasamos por diversos sitios de la localidad como el barrio Portal II, aledaño a la cárcel de La Picota, recorrimos parte de la rivera de la quebrada La Chiguaza, la ladrillera San José y finalizamos en la Casona de la Hacienda Los Molinos, en todos los sitios se realizaron paradas para conocer parte de la historia de estos lugares y su evolución con el paso del tiempo.
La travesía resultó muy enriquecedora, por ejemplo, en la visita a la quebrada La Chiguaza conocimos que esta debe su nombre a la población indígena, el cual significa Luna Ondulante, quizás inspirado en sus aguas cristalinas que provienen desde una montaña en la localidad de Usme y que trae sus aguas frías atravesando los barrios El Valle, Molinos II, San Agustín, y Molinos Primer Sector.
Cabe destacar que algunos habitantes antiguos se sienten orgullosos de su entorno y nos cuentan historias a medida que avanzamos en el recorrido, Eloisa por ejemplo, un mujer con más de 50 años de experiencia en los chircales nos cuenta que esta actividad le permitió criar, prácticamente sola a sus ocho hijos, "mi madre cuidaba mis hijos más pequeños, yo me iba con los más grandes a hacer ladrillo artesanal, el trabajo era duro pero teníamos con que comer y con que darles estudio, mi esposo se bebía casi todo lo que ganaba, pero yo me siento muy agradecida con el trabajo que tenía".
Durante el recorrido histórico los habitantes del sector relataron historias de la Hacienda Los Molinos Foto: Amanecer Comunitario |
Y es que en los hornos de la Hacienda los Molinos, según el testimonio de los vecinos, se cocinó gran parte del ladrillo de la Bogotá histórica, de lo que hoy llamamos el centro, "El Capitolio, la Catedral Primada, el Palacio de Liévano y todas esas casa coloniales que aún quedan en el centro se hicieron con el ladrillo de los chircales de la hacienda", contó Raúl Veleño, quien todavía trabaja en los pocos hornos que quedan en la hacienda.
Hablando un poco de la riqueza arquitectónica de la casona, esta se destaca por sus arcos, columnas, grandes balcones, un sótano donde permanecen los molinos, importados desde Marruecos y traídos en barco hasta Buenaventura y luego transportados en tren la capital colombiana, con los cuales se procesaba el trigo cultivado en la sabana de Bogotá que abastecía a la ciudadanía capitalina de aquellos años.
Hablando un poco de la riqueza arquitectónica de la casona, esta se destaca por sus arcos, columnas, grandes balcones, un sótano donde permanecen los molinos, importados desde Marruecos y traídos en barco hasta Buenaventura y luego transportados en tren la capital colombiana, con los cuales se procesaba el trigo cultivado en la sabana de Bogotá que abastecía a la ciudadanía capitalina de aquellos años.
Vista lateral de la Casona Foto: Amanecer Comunitario |
Un monumento del que aún se conservan sus ruinas es la capilla, construida por la Compañía de Jesús (Los Jesuitas) sus primeros habitantes y dueños de la hacienda, allí oficiaban sus servicios religiosos y épocas posteriores era usada personalidades de la política, por ejemplo fue allí donde se casó doña María Eugenia Rojas Correa de Moreno Díaz, la hija del Teniente General Gustavo Rojas Pinilla, recordado por asumir el poder en Colombia por medio de un golpe de estado.
![]() | ||
La capilla fue construida por los Jesuitas en década de 1950. Foto: Amanecer Comunitario |
Varias historias se tejen con el paso de los años y son transmitidas de generación en generación, una de ellas nos la contó un habitante de la zona, "esta capilla tiene su historia, se dice que en cierta ocasión la campana que pendía desde lo más alto de la capilla cayó y decapitó al sacerdote que oficiaba la misa en ese momento, de ahí surgió la leyenda de que en las noches el alma de cura sin cabeza se veía recorriendo el lugar y celebrando la misa", manifestó Asdrubal Cáceres, habitante del barrio Marruecos por más de 40 años.
Quebrada La Chiguaza nace en las colinas de la localidad de Usme Foto: Amanecer Comunitario |
Durante el recorrido patrimonial nos encontramos con Roberto Acuña Gómez, un hombre enamorado de su localidad y de su entorno, el cual ha sido su morada por más de 30 años, una forma como dice devolver parte de lo que le ha dado la ciudad es plasmarla a través del dibujo, por eso de forma particular ha ido coleccionando bocetos realizados por el durante varios años, con el fin de captar el paso del tiempo.
![]() | |
Roberto Acuña sostiene el dibujo que realizó de los molinos de piedra. Foto: Amanecer Comunitario |
"Yo he dibujado la Hacienda Los Molinos desde que estaba en buenas condiciones, hoy la han ido dejando caer a pedazos, he dibujado los molinos que se encuentran ubicados en el sótano, los jardines, la fachada de la casa, la quebrada Chiguaza, los chircales, los árboles que rodean este lugar, muchos de ellos ya no existen, otros los han talado", señaló Roberto.
Compartimos la entrevista realizada a este artista empírico que pretende sensibilizar a la comunidad a través de sus pinturas para que se apropien de su localidad y aprecien la riqueza histórica que guarda de la ciudad capital.
Compartimos la entrevista realizada a este artista empírico que pretende sensibilizar a la comunidad a través de sus pinturas para que se apropien de su localidad y aprecien la riqueza histórica que guarda de la ciudad capital.
Después de este recorrido, nos queda una reflexión y a la vez una petición a las autoridades a cargo de la conservación de lugares históricos como este, nos cuentan que la última familia propietaria de los terrenos, Morales Gómez, donó este predio donde se encuentra la casona de la Hacienda Los Molinos, para que el Distrito lo convierta en un museo, pero que por trámites burocráticos esto no ha sido posible.
Lo cierto es que la falta de mantenimiento de la estructura y la delincuencia, han ido acabando con lo que queda de aquella casona, las personas encargadas del cuidado de su han tenido en varias ocasiones que rescatar algunas de las enseres de manos de los ladrones que han se han llevado, vajillas, pinturas, muebles y hasta la cabeza disecada de un toro que adornaba la sala y que fue un trofeo de su último propietario, amante de la fiesta taurina.
Esperamos que la administración de turno no dilate más la intervención a este patrimonio histórico de la ciudad y por fin tengamos un lugar digno donde imaginar la Bogotá de los pasados 400 años.
Vale la pena que como familia programemos y aprovechemos estos recorridos patrimoniales que ofrece la localidad Rafael Uribe, conocer la cultura histórica nos permitirá también conocer muchas de las riquezas, tanto ambientales como arquitectónicas, que aún nos quedan. Le recomendamos visitar los chircales, la iglesia y mirador de la resurrección, el parque entre nubes y el bosque de San Carlos, entre otros lugares.
Lo cierto es que la falta de mantenimiento de la estructura y la delincuencia, han ido acabando con lo que queda de aquella casona, las personas encargadas del cuidado de su han tenido en varias ocasiones que rescatar algunas de las enseres de manos de los ladrones que han se han llevado, vajillas, pinturas, muebles y hasta la cabeza disecada de un toro que adornaba la sala y que fue un trofeo de su último propietario, amante de la fiesta taurina.
Esperamos que la administración de turno no dilate más la intervención a este patrimonio histórico de la ciudad y por fin tengamos un lugar digno donde imaginar la Bogotá de los pasados 400 años.
Vale la pena que como familia programemos y aprovechemos estos recorridos patrimoniales que ofrece la localidad Rafael Uribe, conocer la cultura histórica nos permitirá también conocer muchas de las riquezas, tanto ambientales como arquitectónicas, que aún nos quedan. Le recomendamos visitar los chircales, la iglesia y mirador de la resurrección, el parque entre nubes y el bosque de San Carlos, entre otros lugares.
Guías pertenecientes al Colectivo Traverso, explicaron detalles a las cerca de 40 personas que acompañamos el recorrido patrimonial. Escuche apartes de esta jornada. Escuchemos algunos de la información proporcionada también por habitantes del sector.